Un viaje al pasado lleno de actualidad
Mientras veía 'Deaf President Now!', me sumergí en marzo de 1988, cuando los estudiantes de la Universidad Gallaudet se unieron para protestar contra la elección de un candidato no sordo para dirigir la institución. Este documental, dirigido por Davis Guggenheim y coprotagonizado por Nyle DiMarco, captura la esencia de un movimiento que desafió las nociones discriminatorias con las que la universidad había operado durante 124 años. Los estudiantes, al asumir el control, nos enseñaron a no subestimarlos y su lucha resuena con las batallas de identidad que enfrentamos hoy.
Un relato inspirador con una poderosa narrativa visual
La película se desarrolla con una pasión que iguala cualquier guion de ficción, reuniendo a los cuatro graduados de Gallaudet que lideraron el movimiento. La interacción entre el lenguaje de señas dinámico y las voces de actores invisibles crea una experiencia única, incluso permitiendo que el público sordo tenga momentos de ventaja, como en una entrevista de TV silenciada accesible solo para lectores de labios. Esta estrategia narrativa me mantuvo completamente cautivado mientras exploraba nuevas capas de esta historia tan poderosa.
Protagonistas y antagonistas que definen un cambio
El documental concentra su enfoque en los estudiantes Greg Hlibok, Jerry Covell, Bridgetta Bourne-Firl y Tim Rarus, quienes lucharon contra la decisión del consejo de elegir a Elisabeth Zinser, frente a candidatos sordos altamente calificados. Con cada escena siento la tensión y la energía de aquella noche de protesta, capturada brillantemente con imágenes de archivo y herramientas de postproducción. Jane Bassett Spilman emerge como una antagonista, subrayando la resistencia del enfoque 'audista' en contra de los avances que los jóvenes sordos estaban exigiendo con urgencia.
Un documental que invita a la reflexión
Lo que realmente me impresionó fue cómo el filme acentúa las distintas perspectivas y las diferencias individuales entre los protagonistas. No se presenta como una masa homogénea, sino como un grupo diverso y lleno de matices. Cada uno de los protagonistas expone sus opiniones, a menudo en desacuerdo, brindando al espectador una visión rica en perspectivas sobre lo que se necesita para generar un cambio. Como espectador, aprecié cómo esto me permitió leer entre líneas, enriqueciendo mi comprensión de este momento histórico.