Introducción a la Disfuncionalidad Familiar
La inmortal primera línea de 'Anna Karenina' de Leo Tolstoy dice: 'Todas las familias felices se parecen entre sí; cada familia infeliz es infeliz a su manera.' Y aunque algunos espectadores pueden pensar que todas las películas independientes sobre familias disfuncionales son iguales, 'All Happy Families' dirigida por Haroula Rose, nos muestra que el género ha tomado una dirección más realista. No obstante, si esto es mejor o peor está por verse.
Una Familia Plena de Conflictos
La historia se centra en Graham (Josh Radnor), un aspirante a guionista y actor cuyo hermano mayor Will (Rob Huebel) protagoniza una serie de televisión extremadamente popular, aunque de dudosa calidad. Will sorprende a Graham con una visita no anunciada desde Los Ángeles a Chicago, a la casa de su infancia que compraron juntos. Su madre Sue (Becky Ann Baker) está lidiando con un episodio incómodo con su antiguo jefe en su fiesta de jubilación, y su padre Roy (John Ashton) podría estar volviendo a las apuestas. Todo esto se complica aún más cuando Graham se reconecta con Dana (Chandra Russell), una amiga de la universidad que se convertirá en su nueva inquilina.
Personajes Auténticos y Actuaciones Sólidas
Josh Radnor, conocido por su papel en 'How I Met Your Mother', interpreta a Graham con una autenticidad que hace que su cansancio y desilusión sean palpables. Becky Ann Baker brilla como Sue, la matriarca que enfrenta la realidad de su familia desmoronándose a su alrededor. La relación entre Graham y Dana aporta una chispa especial a la narrativa, bien escrita por Haroula Rose y Coburn Goss.
Complejidad Argumental
'All Happy Families' a veces parece ser varias películas en una, con subtramas que compiten por la atención. Aunque esto aporta riqueza a la historia, también puede resultar abrumador. Los segmentos de comedia romántica entre Graham y Dana son los que más destacan, pero el filme toca una variedad de temas pesados que no tienen suficiente tiempo para desarrollarse plenamente.
Conclusiones
Al final, 'All Happy Families' me dejó con sentimientos encontrados. Aunque disfruté de las actuaciones y de ciertos momentos bien logrados, sentí que la película intentaba abarcar más de lo que podía manejar en sus 90 minutos. La obra sugiere una narrativa interesante pero finalmente se siente inconclusa, como si fuera el piloto de una miniserie en lugar de una película independiente completa. A pesar de sus defectos, la película ofrece una representación auténtica y matizada de la disfuncionalidad familiar que vale la pena ver.