Introducción a una Brutal Fantasía Urbana
Hace treinta años, la cultura gótica recibió una descarga generacional insólita con el estreno de 'El cuervo' de Alex Proyas, una notable adaptación cinematográfica del cómic de culto que elevó a la categoría de icono a Brandon Lee. Ahora, en plena era del cine de superhéroes, tocaba un renacimiento con esta nueva visión de Rupert Sanders. La película de 1994 llevaba el subgénero a lo más oscuro y vicioso, y esta nueva versión en 2023 mantiene esa esencia, aunque con algunas señales claras de la actualidad cinematográfica dominada por Marvel.
Una Revisión Moderna que se Desvía del Original
El 'Cuervo' de Rupert Sanders se aleja bastante del material original de James O'Barr, llegando a parecerse más a una de las muchas secuelas que surgieron tras el éxito de la primera película. Bill Skarsgård y FKA twigs interpretan a dos jóvenes excluidos y politoxicómanos que, antes de que entren en juego las fuerzas sobrenaturales y la venganza, viven una historia de amor sensual y tórrida. Este enfoque en su relación toma su tiempo, algo que puede parecer extendido de más, pero que es fundamental para entender el conflicto posterior y la energía que impulsa a Eric Draven en su misión de venganza.
Más que una Simple Historia de Venganza
El enfoque de Sanders permite un conflicto mucho más complejo y rico. La película juega con la dualidad del odio y el amor, mostrando una frontera tenue entre la vida y la muerte. Skarsgård interpreta a un joven marginal que se va transformando progresivamente en el Cuervo, un ángel de venganza. Esto se contrapone a su némesis, encarnado de manera siniestra por Danny Huston, quien representa a la alta sociedad y las élites, añadiendo conciencia de clase a la saga. Este toque moderno, aunque no siempre efectivo, le da un aire fresco y necesario.
Una Ultra Violencia Impresionante y Gore
Uno de los elementos más llamativos de esta película es su ultraviolencia. Las secuencias sangrientas, en particular la del teatro, son de las mejores del año: mutilaciones y decapitaciones gloriosamente splatter se mezclan con una estética operística que recuerda al cine italiano de Argento. No es la única escena violenta; la del túnel y el apartamento también se caracterizan por impactos directos y desparramamiento de sesos, incluso incorporando momentos de body horror.
Conclusiones
Este remake de 'El Cuervo' no es perfecto, pero se nota que Rupert Sanders intentó cosas nuevas y arriesgadas, sin una mesa de ejecutivos que dictaminara cada decisión. La película equilibra una trágica y sensual historia de amor con secuencias ultra violentas, actualizando y revitalizando el mito. La revisión moderna puede no resonar con todos, pero su fidelidad y riesgos son apreciados en un mar de cine de superhéroes estandarizado.