Una ambición que supera al director
Al embarcarme en el visionado de 'Isla Perdida', dirigida por Fernando Trueba, tenía expectativas altas, impulsadas por las declaraciones del propio Trueba sobre su deseo de fusionar el cine de Alfred Hitchcock y Patricia Highsmith. Sin embargo, a medida que la trama avanzaba, me di cuenta de que esas aspiraciones quedaban en un intento fallido. Imitar al maestro del suspense no es tarea fácil, y lamentablemente, Trueba no logró captar la esencia de ese tipo de cine en esta ocasión.
Falta de profundidad en la narrativa
La película, que se encuentra disponible en la plataforma , narra la historia de Max (interpretado por Matt Dillon), un hombre enigmático que regenta un restaurante en una isla griega. A primera vista, la trama promete intriga y romance sutil, pero en lugar de ofrecer una narrativa envolvente, nos encontramos con un guion artificial y una puesta en escena poco natural. La química entre Max y Álex (Aida Folch) simplemente no existe, lo que hace que sus interacciones se sientan robóticas y forzadas.
Un entorno poco auténtico
A pesar de lo falso que se siente el escenario, no se puede negar que la Grecia presentada es visualmente agradable. Restaurantes pintorescos y hogares con vistas al mar crean un ambiente que podría haber sido un punto fuerte para la cinta. Sin embargo, la falta de autenticidad en la relación principal y en la construcción de un misterio sólido hace que todo se desmorone. Trueba intenta crear una historia con elementos mínimos, como un restaurante y una casa rodeada de agua, pero no logra utilizarlos de manera efectiva.
Actuaciones desaprovechadas
Las actuaciones en 'Isla Perdida' son decepcionantes. Matt Dillon, un actor de gran talento, parece perdido, como si hubiera aceptado este papel sin saber realmente por qué. Aida Folch tampoco logra aportar vida a su personaje, y la dinámica entre ambos es prácticamente inexistente. La película incluye personajes secundarios que podrían haber sido interesantes, pero que quedan opacados por un guion y una dirección que no les dan el espacio necesario para brillar.
Conclusiones
En resumen, 'Isla Perdida' de Fernando Trueba es una ambición fallida. Aunque tiene momentos, como la música de jazz y algunas escenas en el restaurante, que podrían haber rescatado la película, en general, no logra ni sorprender ni enganchar. La historia carece de la tensión y la profundidad que caracterizan las obras de Hitchcock y Highsmith. Para los que esperaban un revulsivo en la carrera de Trueba, me temo que tendrán que seguir esperando.