Un argumento cautelosamente guardado
'Mantícora' ha protegido su argumento desde su anuncio, desviándose de los habituales giros de guion y cambios de género, y preferente una narración singularmente provocativa. Su singularidad radica en gran medida en la personalidad del director Carlos Vermut.
La incomodidad intencional
La película sitúa al espectador en una posición incómoda, pero fascinante. Con una temática complicada, un ritmo lento y una dirección austera, todo sirve para acentuar el argumento principal.
Actuación destacada
El filme destaca por la actuación merecidamente elogiada de Nacho Sánchez y Zoe Stein en dos roles complicados y delicados.
Un enfoque directo pero sutil
Vermut utiliza situaciones extremas para hablar de algo muy natural pero a menudo evitado. Crea empatía con un personaje con el que normalmente no lo haríamos, permitiendo a los espectadores juzgar sus propios pensamientos y prejuicios.
Escenas visualmente impactantes
Algunas escenas son especialmente impactantes y memorables, con mínimos diálogos y una planificación compleja.