Una actuación a medida
Desde que la pantalla mostró las primeras escenas de 'Marbella', sentí una conexión inmediata con César, personaje magistralmente interpretado por Hugo Silva. La serie, que se estrena este 2 de mayo en Movistar Plus+, exhibe un guion sumamente adaptado a las sutilezas de Silva, un actor que, en mi opinión, ha estado a menudo subvalorado y desaprovechado en trabajos anteriores. Silva se adueña del relato, elevando el nivel de la serie a cotas inesperadas, algo que me hizo preguntarme si 'Marbella' hubiera tenido el mismo impacto sin él.
Impecables raíces en la realidad
Dani De la Torre y Alberto Marini, los creativos detrás de notables producciones como 'La Unidad', son los artífices de esta pieza que toma inspiración en las auténticas indagaciones periodísticas de Nacho Carretero y Arturo Lezcano acerca del entramado criminal en Marbella. Me quedé cautivado al reconocer que, tras la ficción, hay mucho de la realidad que aún sacude a esta ciudad, famosa por ser escenario de corrupción y operaciones de narcotráfico.
Lujo y crimen: el decorado perfecto
El escenario que enmarca 'Marbella' es de por sí una declaración de intenciones; es un lujo decadente, un residuo de tiempos pasados que De la Torre y Marini saben usar con astucia para contar su historia. No obstante, he notado que la trama, en ocasiones, parece perderse en giros y subtramas que quizás resten pulcritud al conjunto de la narrativa, pero este es un detalle menor frente a la solidez del proyecto.
Un enfoque fresco e irreverente
Lo que distingue a 'Marbella' de otras propuestas del género es su enfoque fresco. La forma en que César, con audacia similar a la de 'El lobo de Wall Street', rompe la cuarta pared me ha parecido una herramienta narrativa efectiva, aportando dinamismo y un toque de humor que nos permite comprender mejor sus motivaciones. Adicionalmente, la relación de César con su hijastra, interpretada por Manuela Calle, añade un matiz de humanidad al personaje.