Intrigas de poder y seducción
Desde el primer momento que 'Mary & George' apareció en mi pantalla, supe que estaba frente a una experiencia cinematográfica prometedora. La serie, que narra la historia de Mary Villiers, interpretada magistralmente por Julianne Moore, nos lleva por un viaje fascinante a través del ascenso de una provinciana a la Condesa de Buckingham en la Inglaterra de Jacobo I. DC Moore nos ofrece una narrativa que-invita a reflexionar sobre ambición y poder en una sociedad compleja, con un guion basado en el libro 'The King's Assassin' de Benjamin Wooley y aderezado con escenas de marcado contenido erótico.
Una Moore imponente
Es imposible ignorar el peso que Julianne Moore aporta a 'Mary & George'. Su interpretación de Villiers es de una intensidad tal que resulta difícil desviar la mirada de ella. Julianne Moore no solo nos ofrece una actuación digna de su variada carrera sino que además se sumerge en su personaje con una entrega total que va más allá de las palabras, usando gestos y miradas que hablan por sí solos. Junto a ella, Nicholas Galitzine se destaca en su papel de George Villiers, el joven ambicioso y seductor criado por su madre para ser más que un mero adorno noble.
La dirección de Oliver Hermanus
En la dirección, Oliver Hermanus juega con luces y sombras, cediendo a esta historia un trasfondo visual que complementa a la perfección las complejidades del guion. La iluminación, las localizaciones y el escenario general se entretejen para ofrecer una serie que, aunque lujosa y culebronesca, tiene momentos de sutileza y profundidad emocional.
Conclusiones
En conclusión, 'Mary & George' ha sabido cautivarme. La serie, disponible en SkyShowtime, es un delicado balance entre la historia palaciega y el entretenido drama que nos mantiene expectantes semana tras semana. La combinación de un reparto brillante, liderado por Julianne Moore y Nicholas Galitzine, con una puesta en escena cuidada y una historia que explora los límites de lo que estamos dispuestos a hacer por poder y posición, la convierte en una recomendación segura para aquellos que disfrutan del drama histórico con una pizca de picardía. Se lleva un merecido 8.5 de mi parte.