El regreso inesperado de una obra perdida
Durante dos décadas, 'The Birthday' permaneció en un incómodo limbo. Dirigida por Eugenio Mira, esta película de 2004 nunca llegó a ocupar las pantallas de los cines, dejando a los amantes del terror en suspenso. Sin embargo, su reciente reestreno gracias a Drafthouse Films ha revivido el interés, presentándonos una versión restaurada en 4K que deslumbra por su calidad visual y narrativa.
Una trama visionaria y adelantada a su tiempo
La historia sigue a Norman Forrester, interpretado por Corey Feldman, conocido por su papel en 'Los Goonies'. Es un relato que nos sumerge en una escena surrealista: una fiesta de cumpleaños en un hotel de Baltimore donde nada es lo que parece. Lo que comienza como un incómodo encuentro social, se transforma en una revelación de cultos secretos y ritos oscuros. La atmósfera ochentera y la trama intrigante resuenan con las influencias de 'La llamada de Cthulhu' y las películas clásicas de horror cósmico.
La dirección de Mira y la música que envuelve
Eugenio Mira no solo dirige esta singular película sino que también compone su cautivadora banda sonora, bajo el seudónimo de Chucky Namanera. La música, reminiscente de los grandes del cine fantástico español, complementa el tono de suspense y la sensación de inminente desastre que impregna el film.
Referencias culturales y un reparto enérgico
El guion, coescrito por Mikel Alvariño, explora las capas oscuras del ideal americano al estilo de 'Blue Velvet'. Jack Taylor ofrece una interpretación memorable, y la estética art déco del hotel proporciona el telón de fondo perfecto para las revelaciones aterradoras. Es un tributo al terror y al cine de culto, desmenuzando el absurdo con destreza y creatividad.
Conclusiones
Ver 'The Birthday' es embarcarse en una aventura visiblemente adelantada a su época. Me dejó sorprendido cómo un largometraje que pudo permanecer en el olvido, ahora capturó mi atención con su detallada puesta en escena y su extraordinario enfoque en el horror cósmico. Es imprescindible para cualquiera que aprecie la narrativa cinematográfica innovadora y los clásicos reimaginados con un toque contemporáneo. Para mí, merece un sólido 8 de 10.